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SUJETO POLÍTICO

LA ESCENA

¿Cómo sería la escena urbana? El filósofo francés Jacques Rancière considera que la escena es fundamentalmente antijerárquica y una compleja red de relaciones en la que se produce el trabajo de construir al mismo tiempo que se identifica. Además, define la nueva ficcionalidad de esta escena, en la que los hechos ya no suceden en el tiempo de los historiadores, sino de forma anacrónica, a partir de la lectura de signos pertenecientes a un lugar, a un grupo, etc.

“No hay real en sí mismo (...). Lo real es siempre objeto de una ficción, es decir, de una construcción del espacio en el que se entrelazan lo visible, lo decible y lo factible.” [1] 

COMPARTIENDO LO SENSIBLE

Compartimiento policial: Configura un orden que determina un lugar específico para cada sujeto, formas de ser y de decir, limitándolos, enmarcándolos en una determinada visión fija del lugar de existencia e importancia de estos sujetos.

Compartir políticamente: es precisamente cuestionar lo consensuado, lo que se ve como incuestionable, y promover rupturas en los modos de aparición y circulación de las palabras, los cuerpos y las imágenes.

“Mostrar lo que no encontraba lugar para ser visto y, dejar oír como habla lo que sólo se percibía como ruido. (...) la imagen puede revelar poderes, reconfigurar regímenes de visibilidad y cuestionar órdenes discursivos opresores.” [3] 

LA POLÍTICA DEL ARTE

El filósofo también defiende que la imagen/arte, para ser política, no necesita retratar las injusticias sociales, sus causas y efectos, llevando al espectador a querer cambiar esta realidad. Debe apuntar a una transformación de las relaciones entre los sujetos que construyen y comparten un mundo, y así contribuir a nuevas formas de sentido común.

“La política y el arte, así como el saber, construyen 'ficciones', es decir, reordenamientos materiales de signos e imágenes, de las relaciones entre lo que se ve y lo que se dice, entre lo que se hace y lo que se puede hacer. (…) Diseñan, por tanto, comunidades aleatorias que contribuyen a la formación de colectivos de enunciación que cuestionan la distribución de roles, territorios y lenguajes –en suma, de aquellos sujetos políticos que cuestionan lo ya dado compartir lo sensible". [4] 

LA EMANCIPACIÓN

La nueva escena propone nuevas condiciones a quienes permanecen en la audiencia, los espectadores, y estos traducen los signos que encuentran en términos de sus propias experiencias e inteligencia, por lo que Rancière llamó espectadores emancipados. Esta emancipación se da también en el paso de lo que él llama el compartir policial de lo sensible, al compartir político de lo sensible.

“Así, trabajar por la emancipación del espectador no implica sacarlo de la silla y hacerlo subir al escenario, (…), sino compartir una experiencia de traducción común, que exige un intelecto activo y una sensibilidad despierta, donde el espectador puede 'hacer su poema con el poema que se hace ante él'”. [dos] 

ESCENAS DE DISENSO

Rancière llama imágenes políticas o disidentes a aquellas que promueven una recombinación de signos que permiten el distanciamiento y la controversia. Los espacios colectivos donde encontramos estas imágenes se denominan “escenas de disidencia”, contradiciendo el consenso, el encuadre.

Tales escenas buscan sacar los cuerpos de sus lugares designados, liberándolos de cualquier reducción a su funcionalidad y dotándolos de rostros, es decir, convirtiéndolos en sujetos políticos que aparecen en el espacio colectivo de exposición, argumentación y negociación.

SUBJETIVACIÓN POLÍTICA

La subjetivación política, a su vez, atañe a estas desidentificaciones que son precisamente la ruptura con el orden policial que determina el lugar de cada sujeto. Esta subjetivación involucra la forma en que los individuos aparecen en la escena pública disidente para hablar de su mundo.

“La lógica de la subjetivación política nunca es la simple afirmación o negación de una identidad, es siempre, al mismo tiempo, la conexión y desconexión entre un lugar de discurso percibido como propio y una identidad impuesta por otro, fijada por la policía lógica.” [3] 

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

  1. RANCIÈRE, J. " El espectador emancipado ". São Paulo: WMF Martins Fontes, 2012b.

  2. MOSTAÇO, E. La emancipación, la escena y el espectador en juego . Cuarto Negro, [S. l.], v. 13, núm. 2, pág. 200-215, 2013. DOI: 10.11606/issn.2238-3867.v13i2p200-215. Disponible en: https://www.revistas.usp.br/salapreta/article/view/69089. Consultado en: abril. 2021.

  3. MARQUES, Ángela. (2014). Políticas de la imagen, subjetivación y escenarios del disenso . Discursos fotográficos. 10.61.10.5433/1984-7939. 2014 v10 n17 p61.

  4. RANCIÈRE, J. " El compartir de lo sensible ". São Paulo: Ed. 34, 2005.

  5. VOIGT, André F. El concepto de “escena” en la obra de Jacques Rancière : la práctica del “método de la igualdad”. Disponible en: https://www.scielo.br/j/kr/a/GSgR36CsZBF7LKbdj7W7mgh/?lang=pt. Consultado en: ABRIL. 2021.

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Trabajo de Fin de Grado

DAU PUC-Rio

2021.2

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Autora:

Gabriella Nucara Lourenço de Mello

 

Mentor:

Octavio Leonidio

Contacto:

nucara.arq@gmail.com

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